La empresa de criptomonedas SafeMoon se acogió al Capítulo 7 de la ley de bancarrotas el jueves, mientras sus ejecutivos enfrentan cargos penales en los EE. UU.

SafeMoon, que está afiliada a un token con el mismo nombre, dijo que tiene entre 50 y 99 acreedores, entre 10 y 50 millones de dólares en activos, y debe entre 100.000 y 500.000 dólares, según una presentación ante el Tribunal de Quiebras de Utah.

Las quiebras del Capítulo 7 dan como resultado la liquidación de los activos del deudor para pagar a los acreedores. A diferencia de las quiebras del Capítulo 11 bajo las que se han presentado otras empresas de cifrado, generalmente no hay intención de reestructurar y relanzar la empresa.

Los ejecutivos de SafeMoon fueron arrestados el mes pasado por funcionarios estadounidenses bajo cargos de conspiración para fraude de valores, conspiración para fraude electrónico y conspiración para lavado de dinero vinculados a acusaciones de que el CEO John Karony, el CTO Thomas Smith y el creador Kyle Nagy se apropiaron indebidamente de millones en activos de inversionistas y mintieron a los clientes. Sin embargo, Nagy fue acusado pero aún no ha sido arrestado.

La firma también enfrenta una demanda de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) por fraude y violaciones de la ley de valores.

SFM de SafeMoon se desplomó alrededor del 42% en las últimas 24 horas, aunque tampoco tiene mucha liquidez ni una capitalización de mercado particularmente grande.