Esto es lo que Taylor Swift puede enseñarte sobre inversiones

Al parecer, la superestrella esquivó un acuerdo catastrófico con FTX al hacer una simple pregunta.

AccessTimeIconApr 26, 2023 at 1:45 p.m. UTC

Las enfurecidas víctimas del colapso de FTX están reclamando a través de una demanda una indemnización de parte de las celebridades que promocionaron al exchange caído en desgracia, y entre ellos se encuentran Larry David, Tom Brady y Shaquille O’Neill. Sin embargo, un nombre que no está en la lista es el de Taylor Swift, a quien se le ofreció un patrocinio de US$100 millones con el exchange de criptomonedas offshore, pero evitó la vergüenza y las posibles consecuencias legales al mostrar un poco de escepticismo.

Read this article in English.

Al parecer, Swift hizo una pregunta a los representantes de FTX durante las negociaciones (negociaciones que en definitiva terminarían fracasando): “¿Puedes decirme que estos [activos cotizados] no son valores sin registrar?”. Esto es lo que contó Adam Moskowitz, abogado de la parte demandante en el proceso contra FTX, cuando conversó con Frank Chaparro, de The Block. Moskowitz aseguró que se puso en conocimiento de este incidente durante la etapa de descubrimiento de la demanda, aunque todavía no hay confirmación del lado de Taylor Swift.

Este artículo es un extracto de The Node, el resumen diario de CoinDesk de las noticias más destacadas sobre blockchain y criptomonedas. Puedes suscribirte para recibir el newsletter completo aquí.

Pero aun si fuese una historia un poco confusa, deja una gran sabiduría. Y no es la primera vez que Swift demuestra que, además de poseer un talento musical, es una brillante y poderosa mujer de negocios, algo que quedó a la vista, por ejemplo, cuando se libró de un engorroso acuerdo publicitario.

Sigue a CoinDesk en Español.

Sin embargo, el aprendizaje de su aventura con FTX es un poco más abstracto de lo que parece. La pregunta de Swift sobre los valores sin registrar fue notablemente premonitoria, dado que ahora estamos viendo agresivas medidas regulatorias contra los exchanges de criptomonedas. Parecería que ella ha estado prestando atención. Pero el hecho de vender valores sin registrar no fue lo que hizo caer a FTX, sino que el culpable fue el fraude. Al parecer, Swift no preguntó a los representantes de FTX: “¿Su equipo de gestión está secretamente enviando activos de los usuarios a un fondo de cobertura asociado?”.

Entonces, ¿cómo logró su pregunta sobre la ley de valores, en gran parte sin relación al riesgo que en definitiva sucedió, hacer que Swift se alejara de hacer negocios con FTX? Solo estoy especulando, pero una opción posible es que ella o la gente de su equipo no estuvieran conformes con la manera en que FTX manejó esa y otras preguntas. Por ejemplo, tal vez Bankman-Fried o sus representantes se mostraron confundidos, descoordinados o a la defensiva, toda una serie de señales que indican que una empresa u organización está teniendo problemas más profundos. (O tal vez al equipo de Swift no le gustó que el niño adorado de FTX jugara a “League of Legends” durante su reunión).

A pesar de la representación de segunda mano de Moskowitz, no podemos estar seguros de si esto es lo que sucedió realmente. Las negociaciones entre FTX y Swift salieron a la luz por primera vez en diciembre de la mano de Financial Times. El acuerdo le podría haber dado a Swift US$100 millones por publicitar la marca FTX en sus recitales. No obstante, según fuentes de FTX, había escepticismo en el acuerdo con el exchange debido a su astronómico precio (a modo de comparación, FTX pagó US$135 millones por los derechos de denominación del estadio Miami Heat).

Pero si la consideramos al pie de la letra, la lección de la historia de Moskowitz es que quizá no es necesario estar completamente empapado de la información que conllevan los riesgos a largo plazo a los que se enfrenta cualquier tipo de inversión. Lo que Swift hizo bien no tuvo que ver con hacer una pregunta específica sobre la ley o los valores en sí, sino que solamente planteó cualquier pregunta desafiante y crítica.

Un verdadero inversor astuto no se enfocará únicamente en el contenido de las respuestas a esas preguntas complicadas, sino que prestará atención a la manera en que se aborda la consulta. Ya sea que se haga de manera directa —como supuestamente hizo Swift— o a través de la persona encargada de las comunicaciones, es una herramienta de evaluación básica y vital en el mundo de los negocios y las inversiones de cualquier nivel.

Al menos en mi versión novelesca, Taylor Swift olió algo raro en las respuestas a sus preguntas sobre la ley de valores y, al caminar en la dirección contraria, evitó una catástrofe.

Este artículo fue traducido por Natalia Paulovsky.

Disclosure

Tenga en cuenta que nuestra política de privacidad, condiciones de uso, cookies, y no vender mis datos personales ha sido actualizada.

CoinDesk es un galardonado medio de comunicación que cubre la industria de la criptomoneda. Sus periodistas siguen un conjunto estricto de políticas editoriales. En noviembre de 2023, CoinDesk fue adquirido por el grupo Bullish, propietario de Bullish, un intercambio de activos digitales regulado. El grupo Bullish es mayoritariamente propiedad de Block.one; ambas empresas tienen intereses en una variedad de negocios de blockchain y activos digitales y tenencias significativas de activos digitales, incluido bitcoin. CoinDesk opera como una subsidiaria independiente con un comité editorial para proteger la independencia periodística. Los empleados de CoinDesk, incluidos los periodistas, pueden recibir opciones en el grupo Bullish como parte de su compensación.


Learn more about Consensus 2024, CoinDesk's longest-running and most influential event that brings together all sides of crypto, blockchain and Web3. Head to consensus.coindesk.com to register and buy your pass now.